🧠 Evaluación Neuropsicológica del TDAH en Niños y Adolescentes
¿Tu hijo o hija tiene problemas de atención, se distrae con facilidad o le cuesta controlar sus impulsos? ¿Te han sugerido desde el colegio que podría tener TDAH y no sabes por dónde empezar?
El caso de Iván
“Desde hace tiempo notamos que Iván tenía muchas dificultades para concentrarse en casa, sobre todo con los deberes. Se distraía con cualquier cosa, necesitaba que estuviéramos encima constantemente y acababa frustrado con facilidad. En clase, su profesora nos comentaba que a veces parecía ‘estar en su mundo’, y otras, interrumpía sin querer o se movía demasiado. Nos preocupaba que estas conductas afectaran a su aprendizaje y a su autoestima.”
Este es el tipo de situación que muchas familias me cuentan cuando llegan a consulta. No se trata solo de si un niño o niña “se porta bien” o “atiende en clase”, sino de comprender qué hay detrás de esas conductas, si se trata de un Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad (TDAH), o si hay otras causas que también pueden estar interfiriendo en su desarrollo.
En estos casos, una evaluación neuropsicológica aporta información valiosa para tomar decisiones y actuar a tiempo.

¿Qué es el TDAH?
El Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad (TDAH) es una condición del neurodesarrollo que afecta a la autorregulación del comportamiento, la atención sostenida, el control de impulsos y, en muchos casos, la actividad motora.
Se manifiesta habitualmente en la infancia y puede impactar en el rendimiento escolar, la autoestima, las relaciones sociales y la dinámica familiar si no se detecta y aborda a tiempo.

¿Cuándo sospechar TDAH?
¿Cuándo conviene hacer una evaluación neuropsicológica?
- Desde casa, el colegio o el pediatra hay sospechas de TDAH.
Si tu hijo o hija tiene problemas de atención, impulsividad o hiperactividad que afectan a su día a día, una evaluación puede aclarar qué está ocurriendo. - El niño o adolescente muestra dificultades persistentes en el ámbito escolar, emocional o conductual.
Puede que le cueste seguir el ritmo de clase, mantener la concentración o gestionar sus emociones. Entender por qué es fundamental para poder ayudarle. - Necesitáis un diagnóstico claro para orientar mejor la intervención.
A veces las dudas generan más bloqueo que el propio diagnóstico. Saber con claridad lo que hay (o lo que no hay) permite tomar decisiones más seguras y eficaces. - Ya existe un diagnóstico, pero queréis una valoración más completa.
Una evaluación neuropsicológica aporta información detallada sobre fortalezas, dificultades y necesidades específicas, y puede complementar otros informes previos.

El proceso de evaluación neuropsicológica
Entrevista clínica con la familia
Recogemos información sobre el desarrollo, comportamiento y contexto del menor.
Aplicación de pruebas neuropsicológicas
Adaptadas a su edad y nivel escolar para valorar funciones cognitivas clave.
Cuestionarios a padres y profesorado
Para conocer cómo se comporta y responde en diferentes entornos.
Observación directa
Valoramos actitudes, nivel de esfuerzo, estilo de respuesta y regulación emocional.
Informe completo y orientación
Conclusiones diagnósticas claras y recomendaciones personalizadas para casa y colegio.
¿Dudas si tu hijo o hija necesita una evaluación?
No estás solo/a. Muchas familias comparten tus mismas preguntas y temores. Dar el paso hacia una evaluación neuropsicológica no es etiquetar, es comprender mejor para poder acompañar de forma adecuada.
